Huitlacoche el "chico maravilla" de Samuel de la Rosa
Foto obtenida de la página oficial de Facebook del Hipódromo de
las Américas
Noticias Internacionales. Hipódromo de las Américas.
México. Para ser un Gigante en la pista se debe de
demostrar compitiendo, sea con rivales nacionales o extranjeros, y para ser
ídolo e inmortalizarse debe trascender en las esferas internacionales, el único
límite para alcanzar la gloria lo tiene el ejemplar, sus propietarios o quizá
su entrenador; sin olvidar la labor del jinete, todos son parte del éxito o
fracaso de un noble animal.
Huitlacoche
el ejemplar de la cuadra San Jorge, entrenado por Samuel de la Rosa y con la
monta excepcional de José Ortega, brindo una carrera que emocionó al respetable
y arranco los aplausos, generando regocijo entre los espectadores.
Sin
embargo, hay que decirlo con todas sus letras, el Ovalo Sotelino, registró una
de las peores entradas para conocer a un Triple Coronado. Y pongo dos casos
emblemáticos, que debe tenerse en cuenta, porque su servidor estuvo ahí.
En
1978, un potro tordillo, Gran Zar propiedad de la cuadra Alejandra, obtenía la
triple corona ante un abarrotado Ovalo Sotelino. Ese ejemplar fue recibido en
el cuadrilátero de ganadores de manera excepcional por el público asistente,
las gradas del majestuoso Hipódromo de las Américas lucían de maravilla.
En
1980, el potro sensación Pikotazo, lograba llevarse los honores de la tercera
prueba de la triplecorona y se convertía en leyenda e inmortal. El Ovalo
Sotelino presentaba una gran entrada.
En
cuanto al 2002, no tuve la oportunidad de estar presente y por ello, no puedo
externar una opinión.
Pero en
este 2015, Huitlacoche, el gran favorito de las mayorías, lograba convertirse
en el séptimo triplecoornado en la historia de la hípica mexicana, cerrando por
la parte externa de la pista con la monta de José Ortega, cruzaba el alambre de
meta en primer lugar, levantando al público y obteniendo del respetable sonoros
aplausos, pero las gradas, no se encontraban llenas, la ausencia del público,
de la afición hípica era evidente, ¿qué
es lo que realmente está pasando en el Ovalo Sotelino?, ¿el espectáculo no es
de calidad?, ¿los ejemplares no son excepcionales?, ¿el costo de las apuestas
que subieron recientemente está ahuyentando a la afición? o quizá, la afición
hípica está perdiendo el interés por la hípica de nuestro país.
Hay
muchas interrogantes y una realidad, el aforo es mínimo y algo se debe de
hacer. Y en mi mente aún esta esas imágenes de más de 90 mil aficionados
coreando y aplaudiendo a American Pharoah, en los Estados Unidos, una afición
que abarroto las gradas del Belmont Park, pero en México, esto no sucedió. La
hípica mexicana necesita con urgencia cambios, antes que el Ovalo Sotelino quede
en el olvido de la afición hípica y toda su grandeza se desvanezca.
Esperamos,
que los responsables de CODERE – México, las autoridades Federales y Locales tomen
cartas en el asunto, promoviendo, impulsando y mejorando la industria de la
hípica mexicana y con ello se avance sustancialmente en generar las condiciones
de que el Ovalo Sotelino recupere el esplendor y la grandeza de aquellos
ayeres, cuando México era considerado, el Gigante del Caribe.
Pero,
entremos en materia, en el Ovalo Sotelino, un ejemplar criado en México se convirtió
en leyenda al ganar de manera contundente el Derby Mexicano. Su nombre,
Huitlacoche el pupilo de Samuel de la Rosa, propiedad de la cuadra San Jorge confirma
su calidad como corredor y se convierte en leyenda al vencer a Hazael y Famous
Palo en la tercera prueba de la triplecorona de potros.
El
favorito, prohibitivo de la afición hípica, respondió con plenitud, viniendo
por la parte externa de la pista y rebasando a escasos metros de la meta a
Hazael y Famos Palo, los cuales buscaron el triunfo afanosamente, pero en esta
ocasión, el momento histórico estaba reservado para Huitlacoche, quién se lleva
la victoria.
Al inicio
de la contienda, salen a marcar el paso Hazael y Famous Palo, ambos buscan el
liderato de la competencia junto con Mr. Pai y Le Petit Policier.
Al
doblar la primera curva, Hazael y Famos Palo mantienen el duelo por el
liderato, más a atrás se colocan a Le Petit Policier y Tocay.
Al
pasar por la recta de enfrente, Hazael y Famous Palo siguen peleando el
liderato, cerca Le Petit Policier y Tocay, mientras que Huitlacoche y
Beckenbager están al fondo.
Al
acercarse a la curva final, Hazael sigue al frente y cerca Famous Palo, Tocay
se coloca en tercer sitio y Huitlacoche empieza a moverse por el lado exterior.
Al
entrar a la recta final, Huitlacoche lanza su reto final, mientras Hazael y
famous Palo siguen su duelo personal.
Ya en
los metros finales, huitlacoche con José Ortega, asume el control de las
acciones y cruza el alambre de meta con clara ven, dejando en segundo lugar a
su compañero de cuadra Hazael, seguido de Famous Palo y Tocay en cuarto.
Con
esta victoria, Huitlacoche conquista la triple corona y se convierte en
leyenda.
El
tiempo del ganador fue de 1.54.2 para los 1800 metros.