Noticias Internacionales. Hipódromo de las Américas. México. Una tarde noche de lluvia fue lo que se vivió en el Ovalo Sotelino, una entrada espectacular, donde la afición hípica estuvo presente y heroica ante las condiciones del clima.
La fiesta programada por la carrera del año, solo mostró su rostro en las dos primeras pruebas de la función, ya que, a partir de ese momento, los mariachis callaron, pero no así la afición hípica que mostro en cada instante y en cada carrera su entusiasmo y pasión.
Callaron las notas musicales, ante una lluvia pertinaz y constante que prevaleció la tarde y noche en la Loma de Sotelo, ni el frio, ni la lluvia, ni mucho menos los resultados de las carreras, apagaron el entusiasmo de una afición hípica que cumplió al llenar las gradas del ovalo Sotelino.
Que hicieron su agosto las autoridades del hipódromo al incrementar el precio de entrada, no puede negarse; que en esta función cortaron el internet para todos, tampoco se puede negar; que la fiesta programada en el escenario no se pudo llevar a cabo debido a la lluvia, no se puede negar. Pero tampoco se puede negar que, a pesar de los pesares, la afición estuvo presente siendo parte fundamental en el espectáculo de las carreras de caballos. Una afición que se lleva los aplausos y que merece que las autoridades del Ovalo Sotelino le brinde un espectaculo de calidad, variedad y alegría acorde a la afición hípica.
No hay que olvidar que la afición hípica es el corazón palpitante de las carreras de caballos, que su presencia, entusiasmo y pasión, es la chispa que engrandece a la hípica, que ningún ejemplar podría ser leyenda, si no es por la aceptación y el apoyo de la propia afición, un hipódromo vació, no permite escribir grandes anécdotas, ni escribir con letras de oro el surgir y renacer de grandes leyendas.
Quedo a deber el Hipódromo en esta ocasión y se espera que recompense a la afición proximamente, así como a todas y todos aquellos que a través de diversos medios de comunicación brindan de manera constante y permanente el acontecer de la hípica mexicana y las carreras de caballos.
Es así como la edición LXXIX del Hándicap de las Américas fue todo un éxito, gracias a la familia hípica que sigue en crecimiento, esperando que tanto criadores, propietarios, entrenadores, integrantes de cuadras presenten ejemplares que brinden a la afición grandes historias y se programen funciones hípicas acordes a las expectativas de una afición tan importante que tiene nuestro país.
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